Ante las medidas sanitarias por el Gobierno, para controlar el avance del Covid-19, el Consejo Seccional de la Judicatura ordenó que las personas que están con detención domiciliaria y siguen en la URI, porque el Inpec no los ha trasladado, serán llevados a sus lugares de residencia por la Policía y el CTI.

Los traslados se harán durante esta tarde, de acuerdo con el anuncio oficial de la entidad.

De esta manera también se busca proteger a la población carcelaria que cuenta con detención domiciliaria pero siguen permaneciendo en la URI.

Es la primera vez que en el país se toma una determinación en este sentido.

Que los detenidos con domiciliaria puedan salir de una vez para sus lugares de residencia, sin el traslado o registro del Inpec.

El objetivo es que el Inpec vaya a los lugares de residencia y haga ese registro.